El monte Kirkjufell (463 m) se encuentra en el oeste de Islandia, cerca de la ciudad de Grundarfjörður en la orilla occidental del fiordo Grundarfjörður en el norte de la península de Snæfellsnes.
La montaña destaca por su apariencia en forma de cuña y sobresale como una península en el gran fiordo Breiðafjörður, que separa el fiordo Grundarfjörður de la laguna Hálsvaðall.
Kirkjufell tiene pendientes muy pronunciadas en todas las direcciones y debe esta forma a los glaciares de la Edad del Hielo, entre los que destacó como Nunatak. Entonces los glaciares podrían haberlo arrastrado por todos lados.